EL NUEVO DÍA-
Se acerca un plebiscito inútil con tres definiciones que no definen a nadie. Este evento electoral no convenció a estadolibristas, ni independentistas; ni los mismos estadistas creen que esa definición de estadidad se ajusta a ellos. Eso lo demuestran las caravanas de la estadidad escasas de participación, lo demuestra la ausencia de esa efervescencia que producen los eventos electorales en Puerto Rico y unas redes sociales que pusieron el tema en neutro. En Washington, el Secretario de Justicia, Jeff Sessions tampoco fue convencido y se retiró de la discusión llevándose el último suspiro de la estadidad antes de sepultarla para siempre.
Los estadolibristas nos definimos nosotros mismos, por eso no vamos a votar. Por eso mi llamado a todos los populares es, que no salgan a votar. No vamos a participar porque nuestro estatus no se llama "actual estatus territorial". Se llama Estado Libre Asociado, una herramienta de futuro que hizo salir de la pobreza a muchas familias, trajo alimentos, otorgó educación, ropa para vestir y una gestión social inimaginable para estadistas, que ven al gobierno como un activo para sus negocios. Para mí está claro, el ELA es de la gente y la estadidad es de los impuestos federales.
La relación de Puerto Rico con los Estados Unidos de América, debe ser un acuerdo entre naciones que permita el desarrollo de ambas de manera firme y permanente. Ese balance estriba en que alcancemos acuerdos sociales y económicos que produzcan crecimiento en servicios que desarrollen al ciudadano individualmente, pero dentro de una agenda nacional que nos encamine al terreno positivo en la economía internacional.
Los Estados Unidos de América tienen buenas herramientas socio económicas y Puerto Rico, es una mina de talentos con una cultura invencible y eso está probado. Cuando los países industrializados de hoy se desarrollaban, en nuestra Isla les enseñábamos cómo se producía desde ropa hasta medicamentos para su distribución mundial. Pero, el ex gobernador Pedro Rosselló y el Partido Nuevo Progresista le solicitaron al Congreso quitarle la Sección 936 a nuestros trabajadores con la única intención de que quebráramos para después ir a Washington con un país insolvente, que a lágrima tendida pidiera a gritos la estadidad como una forma de "bail out" o salvación económica.
Pero cuando ellos iban, los norteamericanos venían. Por eso les han sacado el cuerpo y les exigieron que colocaran al Estado Libre Asociado en la papeleta porque, igual que en el pasado, es la única alternativa que puede hacer de Puerto Rico un país de progreso uniformando los beneficios económicos de las Leyes de Cabotaje, garantizando la ciudadanía por nacimiento y tramitando todas las herramientas de desarrollo económico que jamás escucharás al PNP mencionar, porque creen que la estadidad llegará por la pena.
De igual forma, el mensaje a mi Partido Popular Democrático es que nos enfoquemos en el desarrollo de esas herramientas económicas para sacar a Puerto Rico del rumbo de la austeridad y colocarlo en el de la prosperidad. Yo quiero que todos tengan más, más empleos, más estímulos para el pequeño y mediano comerciante, yo quiero devolverle a nuestros pensionados el dinero que el PNP le quitó, más ayudas para las familias víctimas de la pobreza y más ayudas para que salgan de esta, igual que salieron cuando llegó el Estado Libre Asociado en 1952. Por todo lo anterior, yo no voy a votar en el plebiscito.